El tenista serbio Novak Djokovic ha sufrido una eliminación inesperada en el Masters 1000 de Montecarlo, siendo derrotado por Alejandro Tabilo. Esta es la tercera vez en los últimos cuatro torneos que Djokovic no logra avanzar más allá de las primeras rondas. A pesar de sus expectativas bajas, su actuación fue calificada como "horrible" por él mismo, citando sensaciones negativas y problemas físicos menores. Su próximo objetivo es prepararse para Roland Garros, donde buscará redimirse.
Además de analizar su decepcionante desempeño en Montecarlo, Djokovic también compartió reflexiones sobre su estado físico y mental. Reconoció dificultades sin ofrecer explicaciones claras, señalando que su enfoque ahora está puesto en mejorar para el siguiente gran evento del calendario.
Djokovic reconoció públicamente que su rendimiento en Montecarlo fue inferior a lo esperado. Expresó fuertes emociones tras la partida, destacando cómo su actuación cayó muy por debajo de sus propias expectativas. El jugador mencionó sentirse terrible durante el encuentro, algo que no anticipaba aunque sabía que podría jugar mal.
En detalle, Djokovic describió su experiencia como una mezcla de frustración y desconcierto. Aunque previó un juego complicado contra Tabilo, no imaginó un desempeño tan deficiente. Durante la rueda de prensa posterior al partido, se mostró escueto y directo al señalar que no tenía una explicación clara para su derrota. Subrayó que esto afecta no solo a su confianza sino también a quienes lo apoyan, ya que presenciar tal actuación puede resultar decepcionante.
Con la mira puesta en Roland Garros, el serbio dejó claro que este es su principal objetivo en tierra batida. A pesar de su reciente tropiezo, busca centrar sus esfuerzos en recuperar su nivel competitivo antes del Grand Slam francés. Djokovic abordó brevemente algunos aspectos físicos que podrían haber influido en su rendimiento actual.
En cuanto a sus planes futuros, Djokovic aseguró que no tiene lesiones graves, pero sí ciertas molestias que considera menores. Indicó que su enfoque será trabajar arduamente para superar esta etapa difícil y llegar en óptimas condiciones a París. Reconoció que sus expectativas para Montecarlo eran modestas, pero aún así quedó sorprendido por la magnitud de su caída. Su determinación queda evidente al recalcar que Roland Garros representa su meta prioritaria en este momento, buscando revertir su situación con un sólido desempeño en el torneo más importante de arcilla.