En el marco de las recientes reformas legislativas, se han implementado cambios significativos que afectarán directamente a los propietarios y compradores de vehículos. La modernización del sistema registral y la reducción de aranceles son dos pilares fundamentales de estas modificaciones. A partir de este año, la transferencia de vehículos experimentará una transformación drástica gracias a la introducción de nuevas medidas gubernamentales.
Una de las innovaciones más destacadas es la creación del Registro Único Nacional Automotor (RUNA), una plataforma digital que promete simplificar y agilizar los procesos de registro de vehículos nuevos. Este sistema permitirá a los compradores realizar la inscripción de sus automóviles 0km directamente desde el concesionario, sin necesidad de acudir a oficinas físicas. Además, se ha establecido un Legajo Digital Único para cada vehículo, lo cual garantiza mayor transparencia y eficiencia en los trámites administrativos.
La nueva política también incluye beneficios económicos notables. El costo de transferencia se ha ajustado al 1% del valor del vehículo, eliminando así las tasas adicionales por emisiones de documentos o identificaciones. Esto representa un ahorro considerable para los usuarios, especialmente cuando se comparan con los antiguos aranceles que oscilaban entre el 1,5% y el 2% dependiendo del origen del automóvil. Con estos cambios, adquirir un vehículo no solo será más rápido y cómodo, sino también mucho más económico.
Estas medidas demuestran el compromiso del gobierno con la modernización y simplificación de procesos burocráticos, facilitando la vida de los ciudadanos y fomentando un ambiente de transparencia y eficiencia. Al impulsar la digitalización y reducir costos innecesarios, se está construyendo un futuro donde los servicios públicos son accesibles y eficientes para todos.